Un cuadro resultón, barato y con marco incorporado (¡vamos, ni en Ikea!). Además, como no pesa, puedes colgarlo con cinta de doble cara a la pared sin necesidad de agujerearla.
La tapa era de la caja de un reloj a la que añadí un dibujo que me hizo mi amigo Boni una tarde que trabajábamos juntos. Está hecho con transferencias de lo que escribimos aquella tarde, cinta adhesiva y tintas al alcohol.
Wow !
ResponderEliminarpero que resulton!!
te has superado marta ;) un beso,
celia
Eres tú, dentro dentro de una caja!!!
ResponderEliminarJajaja...Genial!!!
Estaría bien poder guardarte en un caja cuando no quieres que nadie te de la lata...
EliminarQue pasada de trabajo y que idea mas genial!!! Me ha impactado!!
ResponderEliminarMe ha gustado mucho lo que le has pintado. Ha quedado un cuadro magnífico.
ResponderEliminarUn beset!